15 de julio de 2007

violando las Leyes de Murphy

Tenía algunas cosas que contar, pero poquísimo tiempo para ello!!!
A ver… Desde aquel día en el aeropuerto han venido pasando ciertas causalidades.
El viernes 01 de junio, termino de escribir el post “De la metamorfosis y otras decisiones” en el cyber del aeropuerto de Maiquetía, me desconecto, cancelo y salgo. Me dirijo a mi puerta de embarque, justo a tiempo, ya estaban llamando. Procedo a ingresar al autobús que te lleva hasta el avión, y sorpresa, la última persona que sube es un viejo amigo de San Cristóbal, tenia como 3 años de no verlo ni saber de el. Nos saludamos, y el siempre con su atareada vida, pegado hablando por el celular:
- El: Hola!
- Yo: Hola, como estas?
- El: Todo bien.
- Yo: Chévere.
- El: Y, cómo está Puerto Ordaz?
- Yo: (risas), Pues, vengo retornando, renuncie a mi trabajo y ya estoy de vuelta nuevamente. Me cansé!
- El: No puede ser!!! En serio?
- Yo: Si, de verdad.
Subiendo las escaleras del avión, coincidimos en asientos seguidos, y bueno como si hubiésemos violado las leyes de Murphi, comenzó nuestra conversa de casi 1 hora de vuelo:
- Yo: Tu por casualidad no montaste una empresa de recursos humanos?
- El: Si, por qué?
- Yo: Porque tenía pendiente llamarte al llegar a San Cristóbal, para comenzar a buscar contactos para un nuevo trabajo allá.
- El: Pero que bien, que casualidad, aún no tienes nada previsto en San Cristóbal?
- Yo: No, nada aun, llegaré y veré que pasa.
- El: Pues si nos hubiésemos buscado no nos encontramos
- Yo: (risas), Y eso?
- El: Sabes que la persona que tenia en la empresa en el área de recursos humanos, la despedí hace como 15 días, y estoy buscando alguien que se encargue de eso y … tu tienes el perfil.
- Yo: Cuéntame
- El: … me dio una explicación de lo que hacían en su empresa y cual seria el trabajo, en definitiva, me hizo una entrevista previa…
- Yo: Me interesa.
- El: Bueno te espero el lunes en mi oficina para que nos entrevistemos con mi socio y decidas si te interesa.
- Yo: Perfecto, nos vemos.
“Señores pasajeros, en breve minutos estaremos aterrizando en el Aeropuerto Buenaventura Vivas que sirve al Estado Táchira”, y así terminó el viaje.
Yo dije, pero que bien… El que obra bien le va bien.. Y seguí.
En el aeropuerto me estaba esperando quien era mi ex novio, con ramo de flores y mis tíos que fueron a buscarme.
Agradable pero triste sorpresa, ver al ex allí, nos habían pasado cosas muy fuertes en los últimos meses, de verdad, mis sentimientos estaban sumergidos en una vorágine de confusiones.
Llegué, nuevamente a casa, pero no como las anteriores visitas, volvía a enfrentarme al escenario de vivir acompañada y tener que rendir cuentas, un tanto difícil, considerando que estuve casi 4 años sin saber que era eso.
Estaba realmente agotada, me cambié de ropa, me puse mi pijama y hasta el otro día, dormí profunda y congeladamente con el frío que hace en estas tierras andinas.

3 comentarios:

todo.bajo.control dijo...

Falta la segunda parte del cuento!!!

Petrusco dijo...

Y ahora es que vendrán retos al peazo de Murphy ese, ya verás!!!

y así las cosas fluirán
en el amor y en el trabajo
cuando se le pone sinceridad
honestidad y sentimiento

Apuesto a ti lil!!!!

Anónimo dijo...

Primera vez que visito tu blog, lo encuentro muy agradable...

Espero que las coincidencias sigan sucediendo en tu vida de una manera así de positiva.

Saludos.